Este hilo no tiene como objetivo unas fotografías de las que me muestre especialmente contento, sino compartir el método de conseguirlas. Está inspirado en el enfoque hiperfocal del que se suele hablar para capturar paisajes con interés el horizonte y en algún elemento más cercano. Por algún sitio he leído que lo empleaban los reporteros gráficos para captar instantáneas callejeras o de guerra. En el caso del objetivo que he utilizado, el Takumar 24 mm, pieza que tenía arrinconada porque sólo va de f3.5 a f11, se consigue a f8 y enfocando a tres metros que todo quede enfocado entre infinito y 1,3 metros, siempre hablando en cámaras de película 35mm para el que fueron proyectados. Al pasar a micro 4/3 tanto he leído y escuchado tanto sobre la conversión para conocer la profundidad de campo que no sé cómo queda la cosa, pero ya haré pruebas. Yo la cámara la preparé justo antes de entrar al mercado porque iba cargado con la bolsa al hombro de la cámara y en el otro lado la mano izquierda ocupada con una bolsa (luego fueron dos bolsas según iba comprando). Con esa profundidad de campo es fácil enfocar aunque se te ponga la gente delante cuando quieres sacar a una dependienta. Lo que te encuentres en la foto ya es otro cantar.
Se echa de menos un bonito desenfoque de fondo, pero uno va en este caso a capturar la escena. Aunque a veces se producen raros efectos como estas naranjas a las que parece han nacido cabezas humanas perfectamente enfocadas.
Otra parte del método es medir la exposición en manual o con prioridad a la apertura justo a la puerta de la escena (mercadillo). A mí me gusta subexponer un paso para que los blancos no se me quemen. Esa medición no la toqué en todo el recorrido. Incluso me valió para captar escenas en claro oscuro. Insisto, toque la cámara para exponer y para enfocar sólo una vez para obtener estas y otras fotos para mí válidas, al menos como ejercicio.
Una tercera parte del método que podríamos bautizar como el vago es componer utilizando el visor electrónico de la en mi caso GF1 levantado en vertical, como aparece Pablo Válido en su logo, aunque más agachado y utilizando una sola mano. Con ello logras pasar casi totalmente desapercibido. Claro, te ven y saben que estás haciendo fotos, pero no se sienten intimidados. A veces ni se dan cuenta de que estás ahí en ese preciso momento. Con todo ajustado bastan décimas para fotografiar. A poco alto que seas, el punto de vista es más cercano que si pusieras la cámara a la altura de la frente.
Como he dicho, este método vago gracias al cual puedes pasar toda una mañana disparando con una sola mano y haciendo lo que quieras con la otra, pierde el agradable desenfoque de fondo. Pero ganas en poder capturar todo lo que hay a tu alrededor (me gusta y busco que la gense se meta en medio del tiro) o incluso sacar a un niño que llega a la carrera y que no has visto, cuando tú lo que estás fotografiando es un perro jugando.
La mayoría de las fotos están recortadas un poco, no todas, y ligeramente enfocadas y contrastadas para compensar la pérdida por la reducción de tamaño para internet. Espero que los que saben me corrijan y los que estamos aprendiendo aportemos cada uno nuestras experiencias.
PD Esta otra foto la realicé con el mismo método como preparación antes de meterme en el mercadillo.
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