Ciertamente era un cielo amenazador, y claramente se veía una cortina de agua que se acercaba, pero ese claro por el que se colaba un poco de luz daba un poco sensación de esperanza, que era algo pasajero. Por eso me recordó al símbolo del
Yin, donde dentro de lo malo siempre hay algo bueno. Tal vez otro día pueda captar el
Yang.
Seguramente podría haber elegido mejores parámetros, pero cuando saqué la foto justo empezaban a caer gotarrones de esos gordos, y no estaba para hacer pruebas arriesgando la cámara

Muchas gracias por pasaros a ver la foto.
Saludos