Sin duda, fotos que exigen al lector su esfuerzo, como suele ser marca de la casa. De la serie, me quedo con la primera, misteriosa y rítmica a la vez. La tercera estaría mejor (según mi modesta y muy discutible opinión) sin el pilar de hormigón, que se identifica fácilmente y rompe la simetría.
Saludos