supercolor escribió: Siempre han sido "regalos" o más bien descuentos sujetos a permanencias
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Eso de regalados es un argumento muy de comercial, me vas a perdonar Guillermo, te lo digo sin acritud . Un abrazo.
Y yo te entiendo, porque desde el punto de vista del consumidor solo ves tu parte. Pero yo conozco las dos. No te quedes en la semántica de la palabra regalo y deduce con algo de lógica lo que pasó todos aquellos años: que la renovación de permanencias a cambio de terminales nuevos, algo que era voluntario, fuera el mecanismo elegido por la mayoría de usuarios para cambiar de móvil cada dos por tres, no te hace pensar que era muy beneficioso para el usuario? Si algo es voluntario y la gente se apunta en tropel, creo que no hace falta dar más vueltas sobre si salía a cuenta y quién salía ganando. Y sin necesidad de deducciones, ya te chivo yo el dato real: era una ruina en la cuenta de resultados.
Los operadores cometieron un gran error en este país al entrar en esa dinámica. Se metieron en un gasto ingente que solo les ocasionaba pérdidas de ingresos (mientras Nokia, Samsung, ZTE,... viviendo su edad dorada). La renovación de permanencias, si los demás hacen lo mismo, no sirve de nada (los clientes que no se te pueden ir por los clientes que no puedes captar). Y dirás: por qué estuvieron tanto tiempo haciéndolo? porque era un caso de dilema del prisionero, el primero que dejase de regalar terminales podía perder muchos clientes al ser el único sin la cartera blindada por permanencias. Telefónica fue valiente y se salió la primera, y los demás le siguieron rápidamente y volvió la sensatez, y los terminales recobraron ciclos de vida lógicos.
Llamarlo regalo, descuento, trueque o pacto satánico es irrelevante, era una sangría económica para los operadores y un sinsentido medioambiental para la sociedad.
Salu2!