Qué gran recuerdo el de los lápices de colores Alpino por la ilusión que nos hacían de niños, y siguen existiendo sesenta años después o más.
No creo que ahora los niños tengan la misma ilusión, ni cuando les hacemos regalos de cientos de euros (ej. un iPad), porque ahora tienen un montón de regalos, los abren y parece que a los diez minutos ya los han olvidado, mientras que antes solo con ver una caja de lápices de colores o de rotuladores nos duraba la felicidad un montón de tiempo.
Saludos.