Como ya he adelantado en otro hilo, he hecho la prueba de limpieza con una compacta como la Fuji XF1, especialmente proclive a pillar polvo en el sensor a través de su sistema de apertura y zoom manual, que tiene mucha holgura. La tenía olvidada en un cajón precisamente por ese motivo. Había pillado una pelusa de considerables dimensiones, perceptible a simple vista a través de la pantalla cuando se enfoca un fondo uniforme (en este caso, un folio en blanco a plena luz). Le he arrimado la boca de la aspiradora a toda potencia, previamente "enchufada" a la boca de una botella de plástico recortada por su base para que abarcara la totalidad del objetivo. Han bastado unos segundos para la limpieza, y ahora el sensor ya no luce esa pelusa ni se advierten otras motas de polvo, salvo tres o cuatro pequeñísimas que se pueden eliminar perfectamente en Lightroom.
Otro sistema que también me ha funcionado a veces en otras ocasiones ha sido el de colocar la cámara sobre la lavadora durante el centrifugado. La vibración provoca el desprendimiento de las pequeñas motas de polvo.
Espero que os sea útil.
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